En este tiempo de tanta convulsión e incertidumbre , el mensaje de aliento y ánimo, que dé el valor para afrontar las crisis , siempre estará cimentado en el evangelio del Señor Jesucristo , en quien por FE aceptamos como nuestro salvador , El brinda la seguridad y certeza que podremos ; a pesar de las dificultades; sobreponernos y encontrar la forma de entender, lidiar , manejar e ir solucionando lo que nos aqueja, duele y obstruye nuestra relación con El y el caminar por esta vida .

“hechos 16:31 “Cree en el señor Jesucristo y serás salvo , tu y tu casa”

Una vida con propósitos fundamentados en la convicción de ser creyentes del Dios vivo y verdadero, marca la poderosa diferencia, pues es el Padre Celestial quién libera de todo temor y brinda la fortaleza interior y su paz. Revisar los propósitos y expectativas de vida para aclarar como queremos seguir viviéndola, y sí, ante todo lo que esta sucediendo en este mundo, que ha conmocionado y generado todo tipo de malestar, ansiedad, temor y desasosiego; se pueda lograr procesar, superar y sanar todos los daños causados ; solo afianzados en la relación con Dios, renovando el compromiso como cristianos , fortalecidos en la fe , creyendo sus promesas y meditando en su palabra y fijando su verdad en nuestras mentes y corazón; lograremos experimentar la seguridad y confianza de que el Señor siempre obra para bien.

“y sabemos que a los que aman a Dios, todas las cosas les ayudan a bien, esto es, a los que conforme a su propósito son llamados»
Romanos 8:28

Estas circunstancias por las que ha tenido que pasar el mundo: de confinamiento y enfermedad, es una sacudida que Dios ha permitido para que despertemos!
Es un llamado a nuestro corazón para voltear la mirada hacia Él.
Y cuestionarnos ……
¿Cómo esta nuestra vida? En realidad ¿quienes somos? ¿hacia dónde vamos?

Despiértate, tú que duermes, y levántate de los muertos, y te alumbrará Cristo
Efesios 5:14

En el fondo, allí en nuestro fuero interno sabemos lo que nos aqueja: la insatisfacción, el dolor, la inseguridad, el temor, la ansiedad, e incertidumbre etc; sabemos que necesitamos un cambio, somos presas de un gran pecado: el de la incredulidad , porque no confiamos en el Señor Jesucristo y en su salvación que nos hace nuevas criaturas
Necesitamos confrontarnos a nosotros mismos y sincerarnos con Dios, El conoce y sabe por lo que estamos pasando, solo es disponer y abrir el corazón con humildad y sinceridad , reconociendo su grandeza, amor y misericordia, El quiere brindar Salvación y su Santa Paz.
Creélo!!! Dios esta detrás de todo lo que esta ocurriendo en este mundo: ¡El es Soberano!!!

“El Señor no retarda su promesa según algunos la tienen por tardanza, sino que es paciente para con nosotros, no queriendo que ninguno perezca,
sino que todos procedan al arrepentimiento”
Pedro 3:9